En entrevista con LA NACIÓN, el precandidato presidencial del Pacto Histórico, Iván Cepeda, reconoce que el gobierno de Gustavo Petro abrió un camino de transformación difícil, pero no exento de “errores”. Con esa autocrítica, desde Neiva, prometió corregir los vacíos del presente mandato, renovar la dietario del cambio y vigorizar la lucha contra la corrupción.
@cate_manchola
Precandidato, ¿por qué quiere ser presidente de Colombia?
El origen de esta candidatura, es uno que para mí ha sido, de alguna modo, inesperado, porque en las elecciones del año 2022, cuando me hicieron la propuesta yo, sistemáticamente, me negué. Lo nuevo ahora es que fueron organizaciones sociales, que son para mí entrañables como, por ejemplo, las de víctimas, las madres de los muchachos de ‘falsos positivos’ y de los que están sepultados en la escombrera en Medellín; frente a una petición de esa naturaleza, era impracticable negarme. Entonces, he asumido esta valentía y lo hago con la conciencia de la responsabilidad que implica. Pero igualmente con la conciencia de que estoy plenamente capacitado, con visión del país, virilidad desde el punto de paisaje personal y humano, con tenacidad y constancia; que son las cualidades y requisitos para practicar el cargo de Jefe de Estado.
Si correctamente hay muchos problemas en el país, ¿cuáles considera que son los tres más importantes?
Hay una repertorio larga. La pobreza y la desigualdad son un gran problema y es la raíz o causa de muchos otros. Por supuesto, todo lo que tiene que ver con la gran corrupción, pero en eso igualmente integro las economías ilícitas. Y la violencia, que es un mal autóctono de la sociedad colombiana, de décadas. Esos tres serán prioritarios en mi software de gobierno.
¿Cuáles cree que sean esos problemas que intentó solucionar el gobierno del presidente Gustavo Petro y no pudo?
El Gobierno ha comenzado un camino de cambio en Colombia que no es acomodaticio, porque llevamos toda una historia de un maniquí financiero, político y social que ha configurado la sociedad colombiana tal y como es. Así que todo cambio en esa estructura tan sólida es difícil. Hemos comenzado un camino de transformación que es evidente, tiene realizaciones concretas, pero igualmente vacíos, equivocaciones y errores.
En ese sentido, ¿qué sí y qué no continuaría de este Gobierno?
Sin duda, seré un continuador del software de Gobierno, porque tiene todos los fundamentos que requiere hoy una transformación de la sociedad colombiana, pero, hay que actualizarlo y priorizarlo. Si se proxenetismo de asuntos que, definitivamente, yo no permitiría: el primero es la corrupción; no puedo hacer una promesa demagógica y sostener que en mi gobierno no habrá corrupción, muy probablemente así lo quiera y lo desee con todas mis fuerzas. El problema de la corrupción en Colombia es que se ha tomado las instancias de todo el Estado. Lo que sí considero es que hay la obligación de una lucha sin cuartel contra la gran corrupción y por eso propuse en Cali que creemos un sistema doméstico contra la macrocorrupción.
Saliéndonos un poco de esas problemáticas, quiero sobrevenir a la inseguridad. El Huila ha sido una de las regiones más afectadas por el fortalecimiento de las economías ilegales y grupos al beneficio de la ley, y según ha admitido el Gobierno, la política de Paz Total fue mal utilizada por parte de esas estructuras para robustecerse. ¿Cómo lo analiza?
Yo no estoy de acuerdo con esa juicio. El fortalecimiento de los grupos armados tiene que ver, como usted lo mencionó, con el crecimiento de las economías ilegales. Un gobierno puede no tener política de paz y ver que los grupos crecen. Si esa juicio fuera cierta, uno no se explica por qué un gobierno que no tuvo política de paz, como el de Iván Duque vio crecer los grupos armados de una modo exponencial. Entonces, puede que la política de paz tenga errores y vacíos, pero no es la causa del crecimiento de los grupos: los grupos crecen porque tienen una disputa territorial y no hay, diverso a una táctica marcial o policial, otras políticas de Estado que contrarresten ese crecimiento, entonces ahí vienen fenómenos como el quinta de la mocedad, soborno a funcionarios de las fuerzas militares y de Policía, o importación y tráfico de armas, o chantajean y extorsionan a la población.
¿Qué errores de esta política de paz no repetirá?
Lo primero es hacer un prospección riguroso. Hay que analizar caso por caso. ¿Se ha hecho correctamente la implementación del Acuerdo de Paz del 2016? ¿Se ha hecho correctamente el proceso de paz con el Eln, sí o no? ¿Los procesos de paz urbana han servido o no? ¿Las mesas con las disidencias han hecho correctamente su trabajo? ¿El proceso con el Clan del Golfo tiene un horizonte y situación procesal claro, sí o no? Desde ese prospección saldrán conclusiones y habrá que acrecentar lo que se ha hecho correctamente y desechar lo que no está teniendo un sensación positivo.
La derecha dice que si continúa la izquierda en el poder, se intensificará la inseguridad, ¿usted qué opina?
La derecha colombiana es experta en vaticinios frustrados. Yo quiero memorar que en el 2022 los voceros de ellos vaticinaban que si Petro triunfaba, Colombia se iba a convertir en una Venezuela, nadie de eso se cumplió.
Una última pregunta para cerrar el tema de la seguridad. ¿Continuará con los gestores de paz?
Esa es una figura útil y en cada uno de los casos hay que hacer un prospección puntual de para qué es, no entregar esas condiciones a personas que no cumplan el rol, lo malversen o utilicen para propósitos distintos a lo que es: proveer la paz.
Ahora hablemos de votos y elecciones. ¿Qué cuentas hace del respaldo ciudadano en las urnas este 26 de octubre?
Yo no hago vaticinios, porque eso regularmente es utilizado en contra de quien los hace. El Pacto Histórico es la única formación que ha hecho el esfuerzo de hacer una consulta democrática. Ninguna otra fuerza lo ha hecho y eso es una demostración de fuerza. Incluso, contra singladura y marea porque han intentado impedir a toda costa que nos fusionemos como Pacto y que podamos preceder la consulta. Somos la única fuerza que está llenando plazas públicas en Colombia y eso se ve con mucha envidia y malestar en otras fuerzas políticas y, por lo tanto, nos intentan minimizar.
Y, ¿lo tomó por sorpresa la renuncia de Daniel Quintero?
No la esperaba, positivamente. Pero la respeto si es su valentía y motivos. Sin requisa, esto sigue, vamos con Carolina Corcho delante.
¿Qué tanto cree que puede afectar esa ladera de Quintero?
Sin duda, le restará votos a la consulta, es muy posible, quién sabe si esos votos se reorienten.
En ese círculo, ¿Qué pasará con Quintero? ¿Irá al Frente Amplio?
No sabría decírselo y ahí sí lo mejor sería preguntárselo a él.
¿Usted se siente seguro de derrotar a quien deba en la consulta interpartidista del Frente Amplio?
Estoy en esto para ser Presidente, así que mi problema no es con mis compañeros del Pacto Histórico o Frente Amplio, sino con la extrema derecha. Y si me preguntas si estoy agudo para derrotarlo: sí, estoy agudo para eso y para batallar con ellos.
¿Cómo aprecia, por ejemplo, las propuestas de De La Espriella?
No le conozco la primera propuesta; he escuchado insultos, pero no propuestas.
Por ejemplo, seguridad con longevo pie de fuerza.
No. A ver, no voy a ridiculizar propuestas, pero considero que aquí vamos a tener, si es el caso, una discusión que yo propongo sea seria, sobre problemas serios, y no sobre guerras de la galaxia, eso no es lo que el país necesita ahora. Necesitamos candidatos y candidatas que piensen y reflexionen sobre el país, y eso no se resuelve formulando la idea de acrecentar o crear más unidades militares con inteligencia industrial, drones, o crear cárceles como las que tiene el señor Bukele en su país. Eso no es lo que necesita hoy Colombia.
¿La inseguridad no es el principal problema?
Sí, sí lo es. No sé si el principal, pero sí es uno de los principales. Pero la seguridad entendida de una modo amplia, no restrictivamente como el problema de la persecución penal de quienes practican la violencia o la delincuencia. Aquí tenemos que hacer un prospección muy serio y sopesado de la violencia rural y urbana, la delincuencia en las ciudades y de lo que está ocurriendo con las economías ilícitas en el radio rural.
Esa coalición Pacto Histórico que retraso convertirse en partido, ¿cómo va?
El partido ya existe porque hay cuatro organizaciones políticas que han hecho congresos en los cuales sus integrantes han votado a servicio de un solo partido. Es sostener, en términos políticos, el Pacto ya existe.
¿Pero procesal?
Ah, ese es otro asunto. Ahora error que se formalice jurídicamente. Pero como tal, el Pacto es una verdad política innegable. No se puede sostener que no existe porque los señores y señoras del Consejo Nacional Electoral, que son de otras fuerzas políticas, (y uno de ellos pertenece precisamente a este área con quien he tenido discusiones y polémicas intensas y ha estado involucrado en un proceso procesal, en este momento está siendo chancillería por la Corte Suprema de Justicia, el exrepresentante Álvaro Hernán Prada); pues con ellos, obviamente, tenemos unas diferencias y ellos deberían, en vez de tomar decisiones sobre criterios políticos e ideológicos, hacerlo conforme a la ley y la Constitución; eso debería regirlos.
Ya que toca el tema de líos con la imparcialidad, ¿cómo analiza la situación de Daniel Quintero y los ruidos de corrupción?
Él los tiene y debe resolverlos.
Pero usted en lo personal, que siempre ha investigado y contrarrestado eso…
Sí, pero nunca he investigado esos en específico.
No. Pero siempre ha estado al frente de…
Sí, cuando lo he considerado necesario.
¿Y en este caso?
No, este no es uno de esos casos.
También siguiendo en esa tangente con líos judiciales, ¿cómo considera que será la medida definitiva en el caso suyo contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez?
Yo considero que, si se toma una valentía en derecho, no cerca de duda que debe ratificar la condena de primera instancia. Espero que así sea. Que mantenga el nivel de rigurosidad con el que fue tomada la valentía por parte de la señora jueza Heredia y que el expresidente termine siendo recluido en alguna parte, es sostener, privado de la franqueza como corresponde con delitos tan graves por los cuales ha sido incompatible culpable.
Finalmente, el próximo 21 de octubre se conocerá la valentía en este caso, ese día, ¿cuál será su dietario? ¿Qué hará?
Asistiré a la valentía y dependiendo de cómo sea nos pronunciaremos. Si es condenatoria, la celebraremos, veremos qué tan seria es en su contenido. Y si es absolutoria, apelaremos.
Gracias por esta entrevista. ¿Me quiere asociar poco más?
¡Voten por mí!
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En entrevista con LA NACIÓN, el precandidato presidencial del Pacto Histórico, Iván Cepeda, reconoce que el gobierno de Gustavo Petro abrió un camino de transformación difícil, pero no exento de “errores”. Con esa autocrítica, desde Neiva, prometió corregir los vacíos del presente mandato, renovar la dietario del cambio y vigorizar la lucha contra la corrupción.
En entrevista con LA NACIÓN, el precandidato presidencial del Pacto Histórico, Iván Cepeda, reconoce que el gobierno de Gustavo Petro abrió un camino de transformación difícil, pero no exento de “errores”. Con esa autocrítica, desde Neiva, prometió corregir los vacíos del presente mandato, renovar la dietario del cambio y vigorizar la lucha contra la corrupción.
@cate_manchola
Precandidato, ¿por qué quiere ser presidente de Colombia?
El origen de esta candidatura, es uno que para mí ha sido, de alguna modo, inesperado, porque en las elecciones del año 2022, cuando me hicieron la propuesta yo, sistemáticamente, me negué. Lo nuevo ahora es que fueron organizaciones sociales, que son para mí entrañables como, por ejemplo, las de víctimas, las madres de los muchachos de ‘falsos positivos’ y de los que están sepultados en la escombrera en Medellín; frente a una petición de esa naturaleza, era impracticable negarme. Entonces, he asumido esta valentía y lo hago con la conciencia de la responsabilidad que implica. Pero igualmente con la conciencia de que estoy plenamente capacitado, con visión del país, virilidad desde el punto de paisaje personal y humano, con tenacidad y constancia; que son las cualidades y requisitos para practicar el cargo de Jefe de Estado.
Si correctamente hay muchos problemas en el país, ¿cuáles considera que son los tres más importantes?
Hay una repertorio larga. La pobreza y la desigualdad son un gran problema y es la raíz o causa de muchos otros. Por supuesto, todo lo que tiene que ver con la gran corrupción, pero en eso igualmente integro las economías ilícitas. Y la violencia, que es un mal autóctono de la sociedad colombiana, de décadas. Esos tres serán prioritarios en mi software de gobierno.
¿Cuáles cree que sean esos problemas que intentó solucionar el gobierno del presidente Gustavo Petro y no pudo?
El Gobierno ha comenzado un camino de cambio en Colombia que no es acomodaticio, porque llevamos toda una historia de un maniquí financiero, político y social que ha configurado la sociedad colombiana tal y como es. Así que todo cambio en esa estructura tan sólida es difícil. Hemos comenzado un camino de transformación que es evidente, tiene realizaciones concretas, pero igualmente vacíos, equivocaciones y errores.
En ese sentido, ¿qué sí y qué no continuaría de este Gobierno?
Sin duda, seré un continuador del software de Gobierno, porque tiene todos los fundamentos que requiere hoy una transformación de la sociedad colombiana, pero, hay que actualizarlo y priorizarlo. Si se proxenetismo de asuntos que, definitivamente, yo no permitiría: el primero es la corrupción; no puedo hacer una promesa demagógica y sostener que en mi gobierno no habrá corrupción, muy probablemente así lo quiera y lo desee con todas mis fuerzas. El problema de la corrupción en Colombia es que se ha tomado las instancias de todo el Estado. Lo que sí considero es que hay la obligación de una lucha sin cuartel contra la gran corrupción y por eso propuse en Cali que creemos un sistema doméstico contra la macrocorrupción.
Saliéndonos un poco de esas problemáticas, quiero sobrevenir a la inseguridad. El Huila ha sido una de las regiones más afectadas por el fortalecimiento de las economías ilegales y grupos al beneficio de la ley, y según ha admitido el Gobierno, la política de Paz Total fue mal utilizada por parte de esas estructuras para robustecerse. ¿Cómo lo analiza?
Yo no estoy de acuerdo con esa juicio. El fortalecimiento de los grupos armados tiene que ver, como usted lo mencionó, con el crecimiento de las economías ilegales. Un gobierno puede no tener política de paz y ver que los grupos crecen. Si esa juicio fuera cierta, uno no se explica por qué un gobierno que no tuvo política de paz, como el de Iván Duque vio crecer los grupos armados de una modo exponencial. Entonces, puede que la política de paz tenga errores y vacíos, pero no es la causa del crecimiento de los grupos: los grupos crecen porque tienen una disputa territorial y no hay, diverso a una táctica marcial o policial, otras políticas de Estado que contrarresten ese crecimiento, entonces ahí vienen fenómenos como el quinta de la mocedad, soborno a funcionarios de las fuerzas militares y de Policía, o importación y tráfico de armas, o chantajean y extorsionan a la población.
¿Qué errores de esta política de paz no repetirá?
Lo primero es hacer un prospección riguroso. Hay que analizar caso por caso. ¿Se ha hecho correctamente la implementación del Acuerdo de Paz del 2016? ¿Se ha hecho correctamente el proceso de paz con el Eln, sí o no? ¿Los procesos de paz urbana han servido o no? ¿Las mesas con las disidencias han hecho correctamente su trabajo? ¿El proceso con el Clan del Golfo tiene un horizonte y situación procesal claro, sí o no? Desde ese prospección saldrán conclusiones y habrá que acrecentar lo que se ha hecho correctamente y desechar lo que no está teniendo un sensación positivo.
La derecha dice que si continúa la izquierda en el poder, se intensificará la inseguridad, ¿usted qué opina?
La derecha colombiana es experta en vaticinios frustrados. Yo quiero memorar que en el 2022 los voceros de ellos vaticinaban que si Petro triunfaba, Colombia se iba a convertir en una Venezuela, nadie de eso se cumplió.
Una última pregunta para cerrar el tema de la seguridad. ¿Continuará con los gestores de paz?
Esa es una figura útil y en cada uno de los casos hay que hacer un prospección puntual de para qué es, no entregar esas condiciones a personas que no cumplan el rol, lo malversen o utilicen para propósitos distintos a lo que es: proveer la paz.
Ahora hablemos de votos y elecciones. ¿Qué cuentas hace del respaldo ciudadano en las urnas este 26 de octubre?
Yo no hago vaticinios, porque eso regularmente es utilizado en contra de quien los hace. El Pacto Histórico es la única formación que ha hecho el esfuerzo de hacer una consulta democrática. Ninguna otra fuerza lo ha hecho y eso es una demostración de fuerza. Incluso, contra singladura y marea porque han intentado impedir a toda costa que nos fusionemos como Pacto y que podamos preceder la consulta. Somos la única fuerza que está llenando plazas públicas en Colombia y eso se ve con mucha envidia y malestar en otras fuerzas políticas y, por lo tanto, nos intentan minimizar.
Y, ¿lo tomó por sorpresa la renuncia de Daniel Quintero?
No la esperaba, positivamente. Pero la respeto si es su valentía y motivos. Sin requisa, esto sigue, vamos con Carolina Corcho delante.
¿Qué tanto cree que puede afectar esa ladera de Quintero?
Sin duda, le restará votos a la consulta, es muy posible, quién sabe si esos votos se reorienten.
En ese círculo, ¿Qué pasará con Quintero? ¿Irá al Frente Amplio?
No sabría decírselo y ahí sí lo mejor sería preguntárselo a él.
¿Usted se siente seguro de derrotar a quien deba en la consulta interpartidista del Frente Amplio?
Estoy en esto para ser Presidente, así que mi problema no es con mis compañeros del Pacto Histórico o Frente Amplio, sino con la extrema derecha. Y si me preguntas si estoy agudo para derrotarlo: sí, estoy agudo para eso y para batallar con ellos.
¿Cómo aprecia, por ejemplo, las propuestas de De La Espriella?
No le conozco la primera propuesta; he escuchado insultos, pero no propuestas.
Por ejemplo, seguridad con longevo pie de fuerza.
No. A ver, no voy a ridiculizar propuestas, pero considero que aquí vamos a tener, si es el caso, una discusión que yo propongo sea seria, sobre problemas serios, y no sobre guerras de la galaxia, eso no es lo que el país necesita ahora. Necesitamos candidatos y candidatas que piensen y reflexionen sobre el país, y eso no se resuelve formulando la idea de acrecentar o crear más unidades militares con inteligencia industrial, drones, o crear cárceles como las que tiene el señor Bukele en su país. Eso no es lo que necesita hoy Colombia.
¿La inseguridad no es el principal problema?
Sí, sí lo es. No sé si el principal, pero sí es uno de los principales. Pero la seguridad entendida de una modo amplia, no restrictivamente como el problema de la persecución penal de quienes practican la violencia o la delincuencia. Aquí tenemos que hacer un prospección muy serio y sopesado de la violencia rural y urbana, la delincuencia en las ciudades y de lo que está ocurriendo con las economías ilícitas en el radio rural.
Esa coalición Pacto Histórico que retraso convertirse en partido, ¿cómo va?
El partido ya existe porque hay cuatro organizaciones políticas que han hecho congresos en los cuales sus integrantes han votado a servicio de un solo partido. Es sostener, en términos políticos, el Pacto ya existe.
¿Pero procesal?
Ah, ese es otro asunto. Ahora error que se formalice jurídicamente. Pero como tal, el Pacto es una verdad política innegable. No se puede sostener que no existe porque los señores y señoras del Consejo Nacional Electoral, que son de otras fuerzas políticas, (y uno de ellos pertenece precisamente a este área con quien he tenido discusiones y polémicas intensas y ha estado involucrado en un proceso procesal, en este momento está siendo chancillería por la Corte Suprema de Justicia, el exrepresentante Álvaro Hernán Prada); pues con ellos, obviamente, tenemos unas diferencias y ellos deberían, en vez de tomar decisiones sobre criterios políticos e ideológicos, hacerlo conforme a la ley y la Constitución; eso debería regirlos.
Ya que toca el tema de líos con la imparcialidad, ¿cómo analiza la situación de Daniel Quintero y los ruidos de corrupción?
Él los tiene y debe resolverlos.
Pero usted en lo personal, que siempre ha investigado y contrarrestado eso…
Sí, pero nunca he investigado esos en específico.
No. Pero siempre ha estado al frente de…
Sí, cuando lo he considerado necesario.
¿Y en este caso?
No, este no es uno de esos casos.
También siguiendo en esa tangente con líos judiciales, ¿cómo considera que será la medida definitiva en el caso suyo contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez?
Yo considero que, si se toma una valentía en derecho, no cerca de duda que debe ratificar la condena de primera instancia. Espero que así sea. Que mantenga el nivel de rigurosidad con el que fue tomada la valentía por parte de la señora jueza Heredia y que el expresidente termine siendo recluido en alguna parte, es sostener, privado de la franqueza como corresponde con delitos tan graves por los cuales ha sido incompatible culpable.
Finalmente, el próximo 21 de octubre se conocerá la valentía en este caso, ese día, ¿cuál será su dietario? ¿Qué hará?
Asistiré a la valentía y dependiendo de cómo sea nos pronunciaremos. Si es condenatoria, la celebraremos, veremos qué tan seria es en su contenido. Y si es absolutoria, apelaremos.
Gracias por esta entrevista. ¿Me quiere asociar poco más?
¡Voten por mí!
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