Diciembre suele ser un mes dulce para las Bolsas. Con la proximidad de cierre del ejercicio los gestores aceleran la rotación de las carteras para lograr un extra de rentabilidad. Después del rally que acumulan las Bolsas en 2024, con ganancias que rondan el 30% en Wall Street y superan el 15% en Europa, cualquier sobresalto puede acelerar la toma de beneficios y consiguientes caídas para las acciones. Pero está visto que a los inversores todo aquello que no tenga que ver con la flexibilización de la política monetaria les resulta secundario. La confianza en que los tipos seguirán bajando sirve de contrapunto a la geopolítica. En una semana en la que la caída del gobierno de Francia y declaración de la ley marcial en Corea del Sur han acaparado los titulas, las Bolsas siguieron con índices como el español marcando máximos de 15 años y los estadounidenses y el alemán revalidando récords.. Seguir leyendo
Los inversores se sobreponen a la inestabilidad política y buscan razones para prolongar rally
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Diciembre suele ser un mes dulce para las Bolsas. Con la proximidad de cierre del ejercicio los gestores aceleran la rotación de las carteras para lograr un extra de rentabilidad. Después del rally que acumulan las Bolsas en 2024, con ganancias que rondan el 30% en Wall Street y superan el 15% en Europa, cualquier sobresalto puede acelerar la toma de beneficios y consiguientes caídas para las acciones. Pero está visto que a los inversores todo aquello que no tenga que ver con la flexibilización de la política monetaria les resulta secundario. La confianza en que los tipos seguirán bajando sirve de contrapunto a la geopolítica. En una semana en la que la caída del gobierno de Francia y declaración de la ley marcial en Corea del Sur han acaparado los titulas, las Bolsas siguieron con índices como el español marcando máximos de 15 años y los estadounidenses y el alemán revalidando récords.. Los analistas destacan que el mercado todo lo puede. Ramón Forcada, director de análisis y mercados de Bankinter, considera que sería sana una pequeña corrección porque cuánto más sigan subiendo las Bolsas en la recta final del año, menos recorrido dejarán para 2025, especialmente en los primeros meses. En las próximas sesiones las reuniones de política monetaria, el informe de inflación en EE UU y las negociaciones de Francia para formar un nuevo gobierno y sacar adelante los presupuestos de 2025 volverán a poner a prueba la paciencia de los inversores. Estas son las claves de la semana en los mercados:. Política monetaria. En los próximos días hasta cinco bancos centrales celebrarán reuniones, pero el que más efecto tendrá en los mercados europeos será el BCE. El consenso espera que se anuncie un nuevo recorte de 25 puntos básicos, el cuarto desde que iniciase el proceso de rebaja de tipos en junio. Pero más que esta decisión, que ya ha sido puesta en precio, lo que el mercado a aguarda es a conocer las proyecciones del organismo para los próximos trimestres y las pistas sobre los próximos pasos a seguir. La debilidad económica de la zona euro, especialmente la de países como Francia y Alemania antaño sinónimo de estabilidad, ha llevado a los operadores a descontar rebajas de las tasas en cada una de las citas hasta situar el precio del dinero en el 2%. Los analistas de Macroyield esperan que el mensaje que traslade la presidente de la institución sea cauto. “El estancamiento de la tasa inflación en torno al 2,7% en los últimos meses no permitirá al BCE emitir un mensaje complaciente. Otro factor que limita el mucho el riesgo de un mensaje especialmente expansivo es la depreciación acumulada del euro frente al dólar desde el pasado mes de septiembre. Un euro débil dificulta la reducción de la inflación”, señalan desde la firma.. Iván San Félix, analistas de Renta 4, considera que el BCE esperará a ver qué impacto real tienen en la economía las amenazas proteccionistas de Trump. Si la nueva administración decide aumentar los aranceles, esto supondría un duro golpe para una economía como la europea que está dando señales debilidad a la vez que aumentan las probabilidades de una inflación más resistente. “De confirmarse dichas expectativas, pondría en una situación más complicada al BCE,que tendría que decidir entre apoyar el crecimiento económico o por el contrario centrarse en su objetivo de control de la inflación”, señalan. Según lo que descuentan los operadores, Lagarde dará prioridad esta vez al crecimiento.. A diferencia de épocas pasadas en las que los países de la periferia eran el quebradero de cabeza para los inversores, ahora la debilidad se centra en algunas de las mayores economías de la región. La producción industrial alemana, uno de los motores de la economía en la región, ha iniciado el último trimestre con un descenso inesperado y frustra las esperanzas de que pueda salir del bache. Alemania encadena seis trimestres de crecimiento escaso y las perspectivas para 2025 no hacen más que empeorar. Antes se esperaba que el PIB avanzara un 0,4-0,8% y ahora un 0,1%, por no decir que va a volver a contraerse. A pesar de esto Forcada cree que el mercado está siendo demasiado optimista y, aunque espera que lo tipos sigan bajando, lo harán de forma más moderada y con menor intensidad de lo esperado.. Inflación EE UU. Un día antes de conocer el veredicto del BCE se publicará el dato de inflación de EE UU. El consenso espera que la tasa general repunte una décima, hasta el 2,7%, y que la subyacente, que excluye el precio de los alimentos frescos y la energía, se mantenga sin cambios en el 3,3%. La resistencia que muestran los precios a caer al 2% combinada con la fortaleza del mercado laboral (en noviembre se crearon en 227.000 empleos, por encima de los 200.000 que preveían los economistas) exigen a la Reserva Federal ser extremadamente cautelosa. El mercado espera que vuelva a bajar los tipos en 25 puntos básicos en la última reunión del año, pero ponen en duda los recortes de 2025. Las probabilidades de que no toque las tasas en enero alcanzan el 63% frente al 58% de una semana antes. Desde Bankinter esperan que para el conjunto del próximo ejercicio la Fed recorte el precio del dinero en 100 puntos básicos hasta situar la horquilla en el 3,5-3,75%. “Es importante que la inflación de esta semana no sorprenda negativamente”, destaca Forcada.. Francia. El viernes el presidente de la república, Emmanuel Macron, comenzó la ronda de contactos con los diferentes partidos para formar gobierno cuyo primer cometido es la elaboración de unos presupuestos que devuelvan el déficit al 5%. Disponen hasta el 21 de diciembre para su aprobación. De no lograrse, se prorrogarían las cuentas de 2024, algo que los inversores ven cómo un fracaso. Con déficit que superará el 6% a cierre del año y una deuda que alcanza el 112% del PIB, el país vecino tiene que hacer grandes esfuerzos para lograr la ansiada estabilidad fiscal. Después del castigo que vienen recibiendo los activos franceses desde que Macron convocara elecciones legislativas en junio, en la recta final de la semana la Bolsa y la deuda frenaron la sangría. Con el bono a 10 años en el 2,87%, la prima de riesgo, entendida como el diferencial de tipos entre Francia y Alemania, se estrechó a los 77 puntos básicos, 11 puntos menos que los 88 registrados en la jornada en la que el bloque de izquierdas y la extrema derecha de Marie Le Pen presentaron dos mociones de censura.. A pesar de la caída del Ejecutivo de Barnier el Cac 40, índice de referencia de la Bolsa francesa, cerró la semana con una subida del 2,65%. Esta recuperación no es suficente para espantar los números rojos. El selectivo galo garetrocede un 1,54% en 2024 y pone rumbo a su peor año respecto al resto de índices europeos desde 2010. Los analistas consideran que la remontada de las últimas sesiones es algo puntual porque el mercado ya había descontado la crisis política. Esto sumado al cierre de las operaciones bajistas (inversores que ganan dinero con las caídas en Bolsa) propiciaron la remontada. Las agencias de rating ya han tirado de las orejas a Francia y advierten que las finanzas públicas están descontroladas. Los analistas esperan que la volatilidad se mantenga alta y mientras algunos ven en las recientes caídas una oportunidad para entrar a precios atractivos, otros creen que es demasiado pronto para aumentar la exposición.