Lo que se ve en la televisión es sólo una parte de la historia de los Premios Oscar. Existe todo un universo entre las pausas para anuncios y en el bar del vestíbulo del Dolby Theatre, donde los nominados y los ganadores se reúnen, celebran y se consuelan. La gala de los Premios Oscar 2025 no iba a ser menos, y ha dejado algunos momentos memorables entre bambalinas.. Seguir leyendo
Si los Premios Oscar 2025 tendrán momentos memorables sobre el escenario, la gala también se recordará por lo sucedido entre bambalinas
Lo que se ve en la televisión es sólo una parte de la historia de los Premios Oscar. Existe todo un universo entre las pausas para anuncios y en el bar del vestíbulo del Dolby Theatre, donde los nominados y los ganadores se reúnen, celebran y se consuelan. La gala de los Premios Oscar 2025 no iba a ser menos, y ha dejado algunos momentos memorables entre bambalinas.. Empecemos por el principio. Al inicio de la gala, Nick Offerman, el locutor de los Oscar, recordó a los asistentes que sus discursos tenían que ser breves y que debían estar atentos a la cuenta atrás. Sin embargo, a él mismo le pilló el toro: «Soy el locutor. ¡No podéis empezar sin mí!», bromeó.. El popurrí musical de Cynthia Erivo y Ariana Grande puso a todo el teatro en pie, pero hubo dos personas que se emocionaron especialmente: Jeff Goldblum y Bowen Yang no reprimieron la euforia ante la actuación de sus compañeras. Al mítico protagonista de Parque Jurásico, por cierto, lo pillaron más tarde cotilleando sus propias fotos de la alfombra roja en su móvil.. Adam Sandler se plantó en la gala de los Premios Oscar con un chándal con capucha azul turquesa. «¿Qué llevas puesto?», recriminaba desde el escenario el presentador Conan O’Brien. «¡Nadie se había dado cuenta hasta que has sacado el tema!», devolvía Sandler, y acusaba al conductor de la gala de discriminarlo. «¡Pues me voy!», hacía ademán de abandonar su asiento el actor, entre murmullos del público. Tras invitar al respetable a montar con él un partidito de baloncesto, Sandler espetaba, mientras abrazaba al nominado a Mejor Actor, «¡Chalamet!».. Cuando la gala de los Oscar terminó, Adam Sandler se puso a las puertas del Dolby Theater y chocó la mano con cientos de asistentes, informa AP.. Emma Stone saltó literalmente de su asiento para aplaudir la victoria de Kieran Culkin como Mejor Actor de Reparto. Diez minutos después, Stone corría al bar con su marido Dave McCary y Jack Antonoff. Stone, productora de A Real Pain, celebró efusivamente la victoria de Culkin, y recordó a Antoff la historia de cómo el actor intentó abandonar la película dos semanas antes del rodaje.. «Literalmente me subí al avión», recordó sobre cómo había logrado llevarlos a él, a su esposa y a sus hijos a Polonia. «Estoy muy orgullosa de él. Está tan loco. Quiero darle un puñetazo y estoy muy orgullosa de él». Culkin, por su parte, le atribuyó el mérito de «lavarle el cerebro a lo Jedi» para convencerlo.. Inmediatamente después de que Culkin ganara, el nominado por AnoraYura Borisov se dirigió al bar del vestíbulo con su coprotagonista Mark Eydelshteyn. El camarero cogió otra botella de champán, pero Borisov lo detuvo. «¿Podemos tomar unos chupitos?» preguntó, y pidió vodka sin hielo.. Zoe Saldaña recibió una gran ovación cuando pronunciaron su nombre como Mejor Actriz de Reparto, pero sólo Ariana Grande saltó para aplaudir al final de su discurso entre lágrimas. Luego, Grande se volvió hacia Selena Gómez, sentada detrás de ella, y las dos se abrazaron.. No se sabe si es que no lo esperaba, pero el Oscar a Mejor Actor pilló a Adrien Brody con un incómodo chicle en la boca. Ni corto ni perezoso, antes de subir a escena a agradecer su premio, se lo lanzó a su novia Georgina Chapman, que corría a buscarlo por el pasillo del patio de butacas.. Nada más bajar del escenario, Brody se dirigió directamente hacia su compañero de nominación Timothée Chalamet. Se abrazaron varias veces y se enfrascaron en una intensa conversación que sólo interrumpieron para fotografiarse junto a Colman Domingo y Sebastian Stan.. Cuando terminó la gala, muchos de los asistentes corrieron a abrazar a Demi Moore, una de las grandes derrotadas de la noche. Ariana Grande salió del teatro de la mano de su novio, Ethan Slater, mientras él intentaba ayudarle con su vestido que, por cierto, le sirvió de apoyo para el móvil mientras aplaudía. Laura Dern e Isabella Rossellini también se fueron juntas y Chalamet salió de la mano de su madre detrás de su pareja Kylie Jenner.
Cultura