La sustitución de Lluís Homar al frente de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, pactada para el 31 de diciembre de este año tras las denuncias por cobros de codirecciones no justificadas, ya ha comenzado su proceso. El Ministerio de Cultura, a través del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), ha convocado el proceso de selección para dirigir el organismo público abriendo hoy el plazo para la presentación de candidaturas que finalizará el próximo 17 de octubre.. Seguir leyendo
El primer requisito que exige el Ministerio es tener una trayectoria acreditada en teatro clásico
La sustitución de Lluís Homar al frente de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, pactada para el 31 de diciembre de este año tras las denuncias por cobros de codirecciones no justificadas, ya ha comenzado su proceso. El Ministerio de Cultura, a través del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), ha convocado el proceso de selección para dirigir el organismo público abriendo hoy el plazo para la presentación de candidaturas que finalizará el próximo 17 de octubre.. La fórmula, al igual que ya se hizo en la Compañía Nacional de Danza, será el el concurso de méritos pidiendo a los candidatos que presenten «un currículum vitae pormenorizado donde se detalle su trayectoria profesional y su experiencia artística y de gestión en instituciones públicas o privadas dentro del ámbito del teatro clásico, en especial del Siglo de Oro». Un requisito que hubiera dejado ya excluido al actual director que hasta su llegada a la CNTC no había tenido relación con el repertorio clásico español en sus años como actor y director.. En el proceso, según las criterios fijados por el órgano que ahora dirige Paz Santa Cecilia, también se valorará «la capacidad de desarrollar una visión artística clara y creativa para la Compañía», equiparada a un conocimiento de la formación especializada y a la labor didáctica del teatro clásico; «poseer capacidad de liderazgo y una red de contactos con el sector de las artes escénicas», y «acreditar experiencia en la administración de una organización, especialmente en áreas como la gestión de presupuestos y la contratación y supervisión de personal». Este último punto sí que lo cumpliría Homar, que en los años 90 dirigió el Teatro Lliure de Barcelona.. Una vez se hayan presentado esas candidaturas, los candidatos serán examinados por los vocales electivos del Consejo Artístico del Teatro del INAEM, pudiendo incluso al cierre de la selección celebrarse entrevistas personales con los seleccionados. Una vez estudiadas esas candidaturas será la propia dirección general del INAEM quien designará a la persona que se pondrá al frente de la compañía.. Cabe recordar que ya la entrada de Lluís Homar en 2019, que había sustituido a Helena Pimenta, no fue bien acogida por el sector del teatro clásico por su falta de experiencia en los textos de esa época. El pasado mes de julio, en las semanas previas al Festival de Almagro, la actriz y directora Marta Poveda publicó en su cuenta de Twitter documentos del Portal de Transparencia que demostraban que el director del organismo cobró tres veces la codirección de producciones de la compañía que en realidad no realizó.. El propio Homar reconoció esos pagos a El Periódico de España y los justificó con un acuerdo al que habría llegado en 2019 con la entonces directora del Inaem, Amaya de Miguel. Según su versión, el organismo del Ministerio de Cultura le habría ofrecido un sueldo de 120.000 euros anuales: 70.000 fijos y otros 50.000 por dirigir y/o protagonizar dos obras anuales.. Antes de que esos pagos se hicieran públicos la actual directora del INAEM había sellado la continuidad por tres años del catalán al frente de la Compañía Nacional de Teatro Clásico al igual que había hecho con el director del Centro Dramático Nacional, Alfredo Sanzol. Una vez conocidos esos pagos injustificados a través de la prensa, el órgano que dirige Paz Santa Cecilia dio marcha atrás y anunció la salida de Homar.
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