Julieta (Barcelona, 2001) tiene un objetivo: ser la próxima diva del pop nacional. Y hacia allí va dando pasos, sin mirar atrás. La catalana aparece en pleno centro de Madrid, en la agencia de prensa que la lleva, acompañada por su representante, un maquillador y un peluquero. Antes de que se hagan las fotos, en la terraza del mercado de los Mostenses, se planta unos tirabuzones en el pelo, un retoque de maquillaje y se cambia la parte de arriba de su look para la sesión. Hace solo tres años que esta veinteañera renunció a sus estudios de ingeniería por la música y ahora es una de las artistas a las que Sony ha firmado con la mirada puesta en el futuro.. Seguir leyendo
La catalana, referente del pop en la escena urbana de Barcelona, da el salto nacional con ’23’, su segundo disco y el primer bajo el sello de Sony
Julieta (Barcelona, 2001) tiene un objetivo: ser la próxima diva del pop nacional. Y hacia allí va dando pasos, sin mirar atrás. La catalana aparece en pleno centro de Madrid, en la agencia de prensa que la lleva, acompañada por su representante, un maquillador y un peluquero. Antes de que se hagan las fotos, en la terraza del mercado de los Mostenses, se planta unos tirabuzones en el pelo, un retoque de maquillaje y se cambia la parte de arriba de su look para la sesión. Hace solo tres años que esta veinteañera renunció a sus estudios de ingeniería por la música y ahora es una de las artistas a las que Sony ha firmado con la mirada puesta en el futuro.. Porque después de convertirse en el referente pop de la nueva escena urbana catalana -bautizada como La banda del pati-, Julieta quiere más. Y 23, su segundo disco de estudio y el primero con una major, es la vía para dar ese salto al resto del territorio nacional. «Estoy en el momento de petarlo a tope y de aprovecharlo. A veces me he cagado un poco de pensar que iba muy lanzada, pero es que ralentizar las cosas no va conmigo, voy siempre palante», apunta con ese acento catalán marcado, con una determinación que contrasta con una dulzura casi infantil.. Precisamente de eso va su nuevo álbum. De romper con ese lado infantil, de enterrar el primer amor y la idea de la eternidad, de entender que las amistades cambian a medida que uno se hace adulto. «Soy una persona muy nostálgica y melancólica, tengo miedo a las despedidas y a las nuevas versiones que puedan venir de mí. Solo necesitaba despedirme de esa idea de los cuentos, he desmontado mi relación con el amor romántico y con la amistad para siempre». Julieta ha dejado de llorar en los brazos de sus amigas por el chaval que le gustaba en el instituto y se ha convertido en «una loba que ya no se enamora ni se deja controlar por un amor que debe olvidar». «Yo ahora me siento una mujer sensual, hipnotizante, pero era algo que no había mostrado en mi música. A mí la sensualidad femenina me inspira mucho y es muy importante que las mujeres empecemos a apropiarnos de nuestra sexualidad. Me gusta esa idea de que somos la parte activa. Yo siempre he sido muy tirá palante en ese sentido y me gusta reflejarlo así».. Ese cambio se produjo a los 23 años, de ahí el título que acompaña a su disco. «Para mí ha sido una edad que me ha marcado, he reflexionado mucho sobre el paso del tiempo y necesitaba despedirme de cosas que yo pensaba que eran para siempre». Y lo ha hecho en pleno proceso de crecimiento profesional. La chavala que en 2022 apostó de verdad por su carrera, cerró 2024 con 56 bolos por toda España, sobre todo en Cataluña, y en 2025 busca afianzarlo y seguir creciendo. «Estos últimos tres años han sido super locos, las emociones se han disparado y tengo mucha más adrenalina. He aprendido a aceptar que nada en la vida será como te imaginas. Mis amigos me dicen que tengo el alma de un hombre de 80 años, siempre he tenido una relación muy seria con la vida».. ¿De dónde sale esa madurez para tu edad?. En este mundo o maduras rápido o te metes una hostia tremenda. Vives muchas cosas en poco tiempo a nivel de emociones. Todas las emociones que yo antes vivía en un año, ahora las vivo en un mes. Han pasado tres años y ni me he enterado. Siento que han pasado diez años a nivel de contenido, me preguntas qué hice el año pasado y no consigo recordarlo.. ¿Por qué? ¿Qué te lleva a ese estado?. Es que hay que hacer un esfuerzo para agarrarse al suelo y estar serena para que no se te vaya la olla. Yo he notado cuando se me empezó a ir. Siempre he estado un poco loquita, pero esto no ha sumado nada en positivo, estoy más loquita. Mi principal problema es que tengo una adicción a la adrenalina, quiero sentir una intensidad extrema en cualquier campo de la vida, como cuando estoy en un escenario. Intentar encontrar paz ha sido muy duro porque esa adicción invadió todo. No hablo de fiestas, drogarme… Solo necesitaba que todo lo que sintiera fuera extremo.. Los dos primeros tercios del disco son casi un manual de cómo desmontar el amor romántico.. Para mí es muy importante el primer amor, defiendo mucho ese first love never dies. He tenido una fe ciega en que el amor sería para siempre hasta que sufrí una ruptura. Me sentó fatal, sentí que era una ruptura con la realidad. Yo creo totalmente en el amor romántico, pero he empezado a encontrarle algunas brechas.. Y, sin embargo, te he escuchado varias veces decir que le da una gran importancia a la soledad.. Disfruto mucho de estar sola, me gusta mi mundo interior. En el estudio me cuesta que haya más gente y cuando estoy escribiendo igual. Necesito tener una buena relación con mi lado más espiritual para hacer buena música. Es verdad que con este trabajo me he encontrado muchas más veces sola que antes, pero es que me gusta, me parece inspirador.. ¿Por qué has tenido esa necesidad de exponerte desde lo más íntimo en este disco?. Yo siempre he sido muy autobiográfica, pero con este disco más y es la primera vez que tuve un poco más de miedo antes de que saliera. Porque soy consciente de que me estoy exponiendo yo y eso duele más cuando recibes críticas. A mí una crítica o una opinión no me afectan pero si es algo realmente mío y profundo sí me afecta. Saber llevar las críticas es de las cosas que más esfuerzo requieren mentalmente en esta profesión y es una de las cosas más mierda que hay.. En tu disco se intuye algo de angustia por crecer.. No me gusta hacerme mayor, no me apetece nada. Acabo de cumplir 24 y ya me estoy rayando. Soy muy ansiosa y muy de sabotearme los grandes momentos solo por la ansiedad de que se acaben. Ahora intento vivir más en el presente, pero tengo tanto FOMO [miedo a estar ausente, por sus siglas en inglés] que lo paso fatal. Soy muy pesada, tengo ansia por vivir cosas todo el rato. Un sábado por la noche, por ejemplo, me da rabia estar en casa pensando que la gente está en un bar disfrutando… Ya lo superaré.. ¿Cómo llevas eso del fenómeno Julieta que hay sobre todo en Barcelona?. He sentido presión en ese sentido porque no sé si todo el mundo va a entender todas las caras que tengo: una es más de popstar, pero también está la cantautora indie. No quiero renunciar a nada, noto que hay muchas expectativas de que haga un tema mainstream a tope para petarlo pero yo no voy con esa mentalidad aún.. ¿Qué es el éxito para ti?. Ahora mismo es estar tranquila y ser buena artista, hacer algo que me represente. Cuando empecé no lo pensaba tanto, solo pensaba en sacar los tema que hacía. Ahora quiero cantar bien, ser buena performer, hacer piezas audiovisuales coherentes. Tengo mucha ambición, pienso en dar un concierto llenando el Palau Sant Jordi y es un sueño, pero pienso en mí, en cómo disfrutaría yo teniendo dinero para montar una escenografía brutal. Me he vuelto egoísta. ¿Firmar con una discográfica grande como Sony hace que esas expectativas sean mayores? ¿Y eso genera angustia?. Yo cuando firmé pensaba que tenía que estar al nivel de la compañía, ser una profesional, trabajar bien… esa presión la tuve. Pero hay gente que firma con una grande solo para hacer música comercial. Muchos fans tenían ese miedo, que cambiara, pero yo he dejado muy claro y ellos a mí también que esto no era tanto de números ni de entrar a tope en las redes sino hacer algo ambicioso artísticamente.. ¿Ese medio a cambiar de tus fans también lo tuviste tú misma?. Sí, claro, que he tenido ese miedo. Yo tardé un tiempo en firmar, me tomé mucho más tiempo de lo que la gente se toma para tomar esta decisión. Así que sí, tuve el miedo, pero cuando firmé confié en que no iba a pasar, que no me iban a cambiar. A mí la música comercial me encanta y los productos mainstream me parecen lo más, no digo que no quiera serlo en ningún momento. Sé que mi proyecto tiene un punto comercial, pero una de las grandes putadas del pop es que tiene muchos campos a su alrededor y no puedes estar pendiente de todo, no puedes tener el control. Y tú acabas siendo una buena performer o una buena cantante que solo llega ahí y ejecuta. Creo que yo no me lo pasaría bien porque disfruto del proceso.. Charli XCX, Lady Gaga, Kylie Minogue… todos esos son referentes que tú has citado. ¿Ese perfil de diva es el que quiere ser Julieta?. Me siento muy identificada con Charlie porque tiene ese punto de diva y de popstar pero desde un punto personal y decadente. Eso quiero ser yo porque creo que retrata muy bien lo que es ser una chica joven. Algo está cambiando, pero siento que el mundo de la música siempre acaba como fomentando los mismos cánones. Quizás lo hemos desmontado un poco, ya no nos lo tomamos tan en serio, porque yo no siento esa presión. También puede ser que yo no la vea y esté súper sometida. Pero yo salgo a un escenario a montar una performance y me visto así por gusto, porque me parece divertido. ¿Por qué ha decidido mantener buena parte de su disco en catalán en este salto nacional?. El catalán es parte de mi identidad, siempre he hecho música en las dos lenguas de manera natural. En mi casa siempre he hablado catalán y castellano. Ni me lo he planteado. Me costaría renunciar a esa parte de mí, me daría mucha pena. La gente se piensa que es algo estratégico pero está cero pensado, de verdad.
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