1. Los Escorpiones, Sara Barquinero. Seguir leyendo
Del excepcional novelón de Sara Barquinero a otra soberbia historia de Luis Landero, pasando por la obra más personal de Fernández Mallo; éstos son los libros nacionales que han marcado el año literario
Precedida de amplia expectación y rápidamente consagrada por la crítica, la novela de Sara Barquinero ha sido sin duda el libro de 2024 en cuanto a menciones, debates y opiniones más o menos fundadas. Y, además, es de una calidad literaria extraordinaria, incluso un poco anacrónica. Ambiciosa -mucho más allá de sus 800 páginas- y cuajada de ideas, Los Escorpiones (Lumen) cuenta al lector una conspiración secular que nace en la Italia protofascista de 1922 y llega hasta la actualidad. De fondo, multitud de temas hilados con notable precisión en un repóquer de tramas que, con ciertas lógicas y disculpables imperfecciones, confirman el buen sabor de boca que la autora dejó con su debut Estaré sola y sin fiesta. Como afirmaba nuestra crítica: «es una de esas obras que justifica que sigamos leyendo novelas». No se fíen de las opiniones ajenas, leánla.. Si ya es difícil competir contra los demás, imagínense hacerlo contra uno mismo. Eso es lo que le ocurre a Luis Landero, escritor de ritmos lentos, concienzudos y reflexivos cuyas novelas gozan de una cadencia especial, una sonoridad casi poética y una honda textura. Todo ello resuena en La última función (Tusquets) que pivota sobre la pregunta de hasta qué punto puede el arte transformarnos y justifica entregarle toda nuestra vida, y que entra de largo en el pódium de las mejores obras del escritor extremeño junto a clásicos como Juegos de la edad tardía o El balcón en invierno.. Innovadora, multidisciplinar e inquisitiva, la trayectoria literaria de Agustín Fernández Mallo, físico de formación, escritor de profesión y heterodoxo de vocación, abarca poemarios, novelas y ensayos marcados siempre por una profunda inteligencia, una irreverencia emocional y un nomadismo estético que convierten cualquiera de sus libros en artefactos originales y sorprendentes. En búsquedas que integran todo aquello que nos rodea para permitirnos saber más acerca de nosotros mismos. Del trance de la muerte de su padre surge Madre de corazón atómico (Seix Barral), novela de duelo y descubrimiento que reflexiona sobre el sentido de la muerte, qué son la identidad y la memoria, y la herencia que recibimos de nuestros ancestros.. Experta en pisar charcos y meterse en jardines, como ha demostrado en sus obras anteriores Las teorías salvajes y Mona, la valentía literaria de Pola Oloixarac está fuera de toda duda. Pocos se hubieran atrevido a firmar las páginas de Bad hombre (Random House), un texto que surgió ante las peticiones recibidas en los últimos años para participar de escraches y linchamientos de distintos hombres, que casos como el del chileno Gabriel Boric, el del argentino Alberto Fernández o el del español Íñigo Errejón han puesto de cruda actualidad. Más allá del tema, es la pátina de sarcástico humor, de reflexión objetiva y de cuestionamiento de la moral lo que confiere a esta novela, pues el tamiz de la ficción es clave, un eco importante para entrar de lleno como referencia en el debate público.. Si hace dos años entraba con fuerza por la puerta del mundo literario con Mis días con los Kopp, novela de trama leve y personajes inverosímiles que exporaba la idea luminosa de que lo fundamental en la comunicación no es el lenguaje, sino el amor, Xita Rubert se ha superado ahora con Los hechos de Key Biscayne (Anagrama). En esta lograda novela, más allá de llevar al límite el juego de espejos entre realidad y ficción, la escritora construye una aguda y compleja reflexión sobre las porosas fronteras de la manipulación, el amor, el duelo y la memoria logrando mantener un tono humorístico y al lector en tensión y en guardia, desconfiado, ante lo que va leyendo.. Autodenominada «novela de placer», es complicado definir un libro como Las ocasiones (Fulgencio Pimentel), de Rubén Lardín, que trata de nada y de todo. El autor del heterodoxo y libérrimo pódcast La mano contra el sol y del también inclasificable La hora atómica, observa el mundo, ejerce de crítico cultural y busca consuelo en las películas y la literatura. Un Montaigne contemporáneo que no desprecia la llamada del sexo y a la vez explora la vida en pareja, que crea en sus cuadernos una crítica a la mundanidad y una alabanza de lo cotidiano y que esculpe alta literatura sin considerarse siquiera escritor.. El celo (Alfaguara) cuenta la historia de una joven de treinta y pocos años que, un buen día, en una fiesta, encuentra una perra abandonada que decide seguirle a casa. Conforme su relación con el animal avanza, se van desvelando todos los traumas y miedos que encierra, fruto de una relación abusiva y malograda, pero también de la educación recibida, de los estereotipos sociales, de su propia visión de sí misma… Del oficio y la paciencia de Sabina Urraca surge esta novela cocida a fuego lento en la que con prosa envolvente y una voz literaria arrasadora, el gran logro de la novela, la escritora construye en una historia sobre el poder de las historias que explora la animalidad inherente al deseo y los paradójicos rostros que puede adoptar el dolor.. ¿Qué queda por contar de la Guerra Civil? Seguramente mucho, pero el gran logro literario de La península de las casas vacías está más bien en el cómo. En cómo David Uclés logra la hazaña narrativa de resolver con humor, inteligencia y grandes dosis de imaginación -un realismo mágico onírico y lleno de lirismo y surrealismo envuelve toda la novela- algunos episodios de extrema violencia de nuestro pasado. Partiendo de los recuerdos familiares, de 15 años de investigación y de 25.000 kilómetros pateados por toda España, el escritor condensa en 700 páginas todos los grandes episodios del conflicto, vividos, protagonizados u observados por algún miembro de la numerosa familia Ardolento, que se desparrama por todo el país dando al libro forma de novela total, de saga bíblica u odiseica.. La original relectura de los mitos clásicos que acometió en los relatos de De Homero y otros dioses le valieron en 2021 entrar en la Lista Granta de los 25 mejores narradores jóvenes de todo el mundo literario en español. En Alcaravea (Páginas de Espuma) Irene Reyes-Noguerol enhebra con su particular estilo, una prosa muy personal donde destacan la oralidad y el uso muy cuidado de un lenguaje de hondo aliento poético, una docena de relatos que exploran todos los recovecos de las emociones humanas. Dolor, desamor, abandono, abuso y violencia campan a sus anchas por estas páginas, hasta penetrar profundamente en el lector.. Tiempo hacía que los lectores esperaban una nueva inmersión novelesca de Andrés Trapiello. Ahora, tras ahondar con profusión en el Madrid de posguerra en su monumental crónica Madrid, 1945. La noche de los Cuatro Caminos, donde narra el atentado perpetrado por un comando comunista en una sede de Falange, el escritor se ha decidido a ficcionar, como deseaba, esas dos Españas que han nutrido su pensamiento literario y político. De los suburbios al hotel Palace, de las fiestas de las embajadas a las chabolas de los asustados, Trapiello reconstruye en esta maravillosa Me piden que regrese (Destino) aquel Madrid de posguerra para elaborar una cruda y dickensiana radiografía de nuestro pasado.. Inteligente y socarrón, irreverente y heterodoxo, el argentino César Aira lleva décadas construyendo una literatura cuyas claves descansan en el gusto por el juego y la improvisación, hasta extremos del absurdo, las constantes reformulaciones de diálogos y las frases sardónicas y un manifiesto desdén por todos esos aparatajes que alejan la literatura del puro acto de escribir. Dueño de una obra que rebasa el centenar de volúmenes, sobre todo novelas cortas, a las que define como «cuentos de hadas dadaístas» o «juguetes literarios para adultos», en En El Pensamiento (Random House) firma un nuevo trampantojo: una novela de iniciación con aires gauchos que subvierte en cada página lo que el lector espera encontrar.. Tras un póker de novelas, John Dunbar cuelga las pistolas, lo que pone fin a una de las más logradas de la literatura española reciente. Desde que en 2020 nos presentara en Basilisco el renegado pistolero que quiere dar la espalda a su pasado de brutalidad y errancia y vivir por fin en paz junto a su familia, Jon Bilbao ha ido construyendo con ritmo y maestría esta metaficcional saga de wésterns que concluye con Matamonstruos (Impedimenta), novela en la que lleva al límite juegos literarios como la autoficción, el cruce de géneros o el ennoblecimiento de la literatura de quiosco. Un espíritu lúdico del que, por ahora, nos deja huérfanos.. Maestro del relato y pionero en la inclusión de la vida normal en la literatura, Sergi Pàmies ofrece en A las dos serán las tres (Anagrama), su nuevo volumen de cuentos -que el año pasado arrasó en Cataluña-, lo que siempre ofrece la escritura de Pàmies: una verdadera fiesta de la literatura, del humor sereno, de la observación inteligente, del inciso oportuno, del apunte malicioso. Aparte de tener el envidiable don de la exactitud, el catalán siempre ha escapado en su copiosa obra de toda retórica, de toda floritura, sin exactamente sencillez pero buscando una normalidad expresiva que, sin embargo, es de una demostradísima eficacia literaria.. Con prosa hipnótica y guiños al Comala rulfiano, Carnada, el impactante debut de la uruguaya Eugenia Ladra, nos habla del asombro ante el descubrimiento de un mundo lleno de contrastes y sobresaltos, de vicios y prejuicios, y de aprender a habitar la herida de ser mujer. Mucha violencia implícita, un clima asfixiante y todo un entramado de machismos, supersticiones y amenazas tejen la realidad de Paso Chico, el pueblo donde la niña Marga, considerada gafe desde su accidentado nacimiento, debe crecer y descubrir lo que es la vida. Regálense la posibilidad de encontrar belleza en el estremecimiento.. 15. He aquí un libro curioso. Apenas ha hecho ningún ruido mediático, pero la primera edición se agotó en 24 horas. Gagarin o la triste certeza de viajar solo (La Navaja Suiza), el segundo libro de relatos de José Moreno, es una rara avis hasta el punto de que el astronauta Gagarin no aparece en una sola página tras protagonizar el título. Lo que sí hay dentro es una decena de relatos con aroma pop y de sabor inequívocamente estadounidense, todos con un hilo común que pasa por cierta desazón en los protagonistas, una tenue necesidad de huir y algo parecido a la soledad, que recrean ambientes arquetípicos bien conocidos por los lectores y que aportan argumentos muy estimulantes, situaciones llenas de posibilidades y formas brillantes de resolverlas. No cometan el error de dejarlo viajar sólo.. 16. Lenguaje y violencia son dos de los principales ejes de la literatura de Mónica Ojeda desde novelas como Nefando y Mandíbula. Temas que cobran nuevo impulso en esta Chamanes eléctricos en la fiesta del sol (Random House), novela de planteamiento maravilloso y argumento fascinante. Tras una ola de desapariciones y asesinatos especialmente cruel y prolongada en Guayaquil, las amigas Noa y Nicole deciden acudir a la fiesta del Ruido Solar, una válvula de escape de música, drogas y experimentación que esconde la intención de una de ellas de ir en busca de su padre perdido. Una trama intensa y original que gana enteros al pasar por la potente prosa de la ecuatoriana.. Un héroe poco probable, una mujer atormentada, una misión suicida ambientada en un episodio marítimo poco conocido de nuestra Guerra Civil y unos secundarios de lujo son los mimbres con los que el escritor teje La isla de la Mujer Dormida (Alfaguara), novela de aventuras que explora conflictos profundamente humanos, con el amor, el deber y la melancolía como sentimientos predominantes. Y de fondo, como en todas las novelas de Arturo Pérez-Reverte, el conflicto moral sobre qué es, en cualquier latitud y época, hacer lo correcto. Estableciendo un guiño con el inicio de Alatriste: No será el escritor más talentoso ni el más sorprendente, pero es un escritor de profundo oficio que logra entretener y enganchar.. El debut narrativo de la periodista Alba Muñoz es un gran ejemplo de cómo la vida real puede convertirse en ficción de calidad y de cómo la clave indiscutible de la literatura contemporánea es el yo, y de la calidad de éste depende el éxito del libro. Centrada en la explotación sexual de mujeres en la posguerra de los Balcanes, tema con el que imbrica recuerdos de sus primeros pasos en el periodismo y reflexiones sobre la sexualidad y la vida adulta, en Polilla (Alfaguara) la autora consigue armar un yo con contorno, con cuerpo, con fuerza y con rabia. Una voz dura y a la vez sutil, inquieta y osada, que logra sublimar en calidad literaria un testimonio de extrema crudeza.. Si Una casa llena de gente era un debut libre de tópicos sobre una historia familiar, la nueva novela de Mariana Sández, una especia de cruce de vidas entre dos primas que cambian, respectivamente, Londres por Buenos Aires, confirma todo lo positivo ya desplegado en ella, en cuanto a calidad literaria. Reflexiones sobre el peso de la vejez y los afectos centran La vida en miniatura (Impedimenta), obra con tono de comedia reflexiva, de melodrama pudoroso, de gran novela clásica, pero con algún oportuno guiño al absurdo, en la que Sández ha sabido construir una historia redonda, irónica, sabia, donde las reflexiones laterales sobre arte apuntan hacia una búsqueda de trascendencia que se acentúa en el desenlace, inesperado pero nada brusco.. María Moreno, Natalia Carrero, Leslie Jamison, Olivia Laing, Caroline Knapp, Marguerite Duras… Con una investigación filológica sobre esta genealogía de escritoras que han escrito acerca de su propio alcoholismo, arranca esta hermosa autoficción de Sofía Balbuena, que pronto deriva hacia una reflexión sobre las adicciones de la propia autora, como la dependencia de la cerveza. En tono sincero y acuciante, Borracha menor (Caballo de Troya) enhebra ideas sobre temas de plena actualidad, como su condición de emigrante y el concepto de pertenencia o la alienación de la sociedad actual, que hacen de este ejercicio de exorcismo una novela notable.
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