Los conquistadores españoles situaban El Dorado en Perú, una tierra donde brotaba el oro por doquier. Muchos de ellos perecieron intentando encontrar ese lugar mítico aún por descubrir. Telefónica ha sufrido su particular leyenda de El Dorado desde que hace tres décadas desembarcara en el país andino. El consorcio que encabezaba Telefónica Internacional pagó 2.000 millones de dólares en 1994 por la privatización de la Compañía Peruana de Teléfonos. El pasado domingo vendió su negocio en Perú a la empresa argentina Integra por apenas un millón de dólares.. Seguir leyendo. Los analistas ven acertada la operación. El consenso de analistas considera acertada la venta que ha anunciado Telefónica de su filial peruana por 900.000 euros a la argentina Integra Tec International. La Bolsa también aprobó la operación. Telefónica cerró la sesión bursátil de este lunes con una subida del 3,12%, hasta los 4,12 euros por título.. Los expertos de Golman Sachs señalan que la transacción es «positiva» porque «confirma que continúa la simplificación de la cartera» de la multinacional española.. Desde Santander indican que Perú ha sido con diferencia el mercado con peor rendimiento de Telefónica en el pasado año y es elogiable que esté vendiendo a un precio ligeramente superior a la valoración que hacen sus analistas. CaixaBank saluda que Telefónica venda la división peruana «tras las dudas previas sobre una posible interrupción». «La venta de Telefónica Perú se alinea con la visión de Telefónica para la región Hispanoamérica, que la compañía ha declarado no estratégica», afirman desde el banco.. Los analistas de Barclays catalogan la salida de Perú como algo «positivo», «ya que Telefónica no estaba cubriendo su costo de capital en la región y, en nuestra opinión, no existía una vía para alcanzarlo». Sabadell también ve la desinversión «positiva» y con un «impacto limitado», y Renta 4 la ve una «noticia esperada», con un precio de venta «compatible con la difícil situación por la que atraviesa Telefónica del Perú».
La multinacional española pagó 2.000 millones de dólares en 1994 por la concesión que ahora ha vendido por apenas un millón. Integra, la compradora, es una firma argentina especializada en reflotar empresas en quiebra
Feed MRSS-S Noticias
Los conquistadores españoles situaban El Dorado en Perú, una tierra donde brotaba el oro por doquier. Muchos de ellos perecieron intentando encontrar ese lugar mítico aún por descubrir. Telefónica ha sufrido su particular leyenda de El Dorado desde que hace tres décadas desembarcara en el país andino. El consorcio que encabezaba Telefónica Internacional pagó 2.000 millones de dólares en 1994 por la privatización de la Compañía Peruana de Teléfonos. El pasado domingo vendió su negocio en Perú a la empresa argentina Integra por apenas un millón de dólares.. A comienzos de los 90, Telefónica, aún controlada por el Estado y bajo la presidencia de Cándido Velázquez, estaba en plena expansión internacional. Por eso, la cantidad desorbitada que abonó en la subasta de la privatización de las telecomunicaciones peruana llamó mucho la atención, al punto que la agencia Moody’s le rebajó la calificación de crédito. El consorcio pagó cuatro veces más del precio de salida y más del doble del que ofreció el segundo concursante, en la mayor subasta de la historia del país. En los siguientes años, la firma española se hizo con el 100% de las empresas privatizadas para dar lugar a Telefónica del Perú (TdP) e implantar su marca Movistar.. Pero los sueños de crecimiento y prosperidad en la región se han convertido en un calvario de litigios y pérdidas para la empresa española. La situación se volvió tan crítica que Telefónica del Perú decidió solicitar voluntariamente el pasado 14 de febrero el concurso de acreedores. La principal razón no fue solo la crisis financiera que afecta al negocio, sino el hartazgo y el alto coste del pleito fiscal que arrastra desde hace dos décadas por más de 1.000 millones de euros debido a sus controversias con la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat), la agencia tributaria de Perú.. Aunque las disputas legales son numerosas, la principal arranca del pago del Impuesto de la Renta de los años 2000 y 2001. La Hacienda peruana computó como ingresos capítulos que estaban incluidos en la concesión, refutó deducciones fiscales, y le impuso una multa a la multinacional española. Sin embargo, el importe discreto de esa sanción se multiplicó con los años por los desproporcionados intereses financieros de demora que le sumaba el Sunat a medida que se alargaba el proceso. Un cálculo de intereses que el mismo Tribunal Constitucional declaró ilegal y que suponen el 80% del total de la deuda fiscal de la empresa española.. Pese a todo, la Corte Suprema falló en enero de 2023 en contra de Telefónica, que tuvo que provisionar 791 millones de euros para hacer frente a la sanción, Durante los 30 años que ha estado presente en el país, la multinacional española ha pagado más de 11.000 millones de soles (2.600 millones de euros) en impuestos. Paralelamente a la disputa en los juzgados, la firma que preside ahora Marc Murtra ha llevado el caso ante el Centro Internacional de Arreglo de Disputas de Inversión (Ciadi), organismo dependiente del Banco Mundial, en un arbitraje que está pendiente de resolución.. La situación financiera tampoco ayudaba. La filial registró unas pérdidas netas de 3.392 millones de soles (872 millones de euros) en 2024, lo que supone multiplicar por 5,5 veces los números rojos del año anterior, y facturó 6.020 millones de soles (1.548 millones de euros), un 7% menos. Los conflictos fiscales y la mala evolución del negocio han disparado la deuda que, al cierre de 2024, ascendía a 4.838 millones de soles (1.241 millones de euros).. Integra, experta en insolvencias. De ahí que Telefónica aprovechara la noche del Domingo de Ramos para decir basta y anunciar la venta de su filial a Integra Tec International por unos 3,7 millones de soles peruanos (un millón de dólares o 900.000 euros al tipo de cambio actual). La transacción incluye la asunción de la deuda por lo que el monto es muy superior al precio simbólico pactado.. Integra está presidida por el empresario y exministro del Interior argentino bajo el mandato del peronista Carlos Menem, José Luis Manzano. Su especialidad es reflotar empresas con problemas financieros en sectores de la economía latinoamericana como la energía, las telecomunicaciones y los medios de comunicación.. La firma, a través de la filial Integra Capital, compró hace un año por 20 millones de dólares a la suiza Glencore su participación en la minera peruana Volcan Compañía Minera, una empresa que, como TdP, atravesaba por serias dificultades financieras. El grupo helvético pagó 734 millones de dólares por la minera en 2017. Integra ya era también propietaria de la Mina Aguilar en Argentina, un yacimiento de zinc, plata y plomo que opera desde hace más de 80 años, y posee PRC (Potasio Río Colorado), el proyecto de potasio más grande de Argentina, así como más de 400.000 hectáreas de concesiones de litio.. La compañía tendrá ahora que lidiar con los acreedores pendientes de que el Indecopi, el organismo estatal que supervisa los procesos de insolvencia y competencia en Perú, apruebe el concurso de acreedores solicitado por Telefónica. También tendrá que negociar con la Hacienda peruana. No en vano, el mayor acreedor de TdP es la Sunat, con 2.473 millones de soles (634 millones de euros), seguido de los tenedores de bonos emitidos por la compañía, en un volumen total de 2.365 millones de soles (606 millones de euros). Integra ya ha señalado que “buscará establecer un diálogo constructivo con todas las partes involucradas, incluyendo el Gobierno y los acreedores”.. Una declaración importante porque significa que Telefónica queda libre de obligaciones desde el mismo momento de la transacción. Y es que, la operadora española, al igual que sucediera en la venta de su filial argentina, se ha asegurado el cierre y el cobro de la venta de su subsidiaria aprovechando la legislación del país. Es decir, que si el Gobierno peruano o los reguladores pusieran alguna traba a la operación, las condiciones que impusieran a la venta recaerían en el comprador. También corre a cargo de Integra resolver las posibles demandas de los acreedores si no alcanza un acuerdo sobre una necesaria quita de la deuda.. La inversora argentina no ha esperado ni un minuto para tomar las primeras decisiones. Para asumir el control operativo de Telefónica del Perú ha nombrado a Germán Ranftl como nuevo presidente del directorio. Ranftl, actual director de Finanzas de Edenor, la principal distribuidora eléctrica de Argentina, tiene amplia experiencia en gestionar activos en riesgo y se ocupará de liderar el proceso de reestructuración de la deuda. El directivo argentino ya trabajó para Integra Investment en el pasado. Y, mientras se consuma el relevo, ha mantenido a Elena Maestre al mando de la filial peruana que debe asegurar el servicio a 13 millones de clientes y el empleo a 3.600 trabajadores.. Los analistas ven acertada la operación. Logo de Goldman Sachs. El consenso de analistas considera acertada la venta que ha anunciado Telefónica de su filial peruana por 900.000 euros a la argentina Integra Tec International. La Bolsa también aprobó la operación. Telefónica cerró la sesión bursátil de este lunes con una subida del 3,12%, hasta los 4,12 euros por título.. Los expertos de Golman Sachs señalan que la transacción es «positiva» porque «confirma que continúa la simplificación de la cartera» de la multinacional española.. Desde Santander indican que Perú ha sido con diferencia el mercado con peor rendimiento de Telefónica en el pasado año y es elogiable que esté vendiendo a un precio ligeramente superior a la valoración que hacen sus analistas. CaixaBank saluda que Telefónica venda la división peruana «tras las dudas previas sobre una posible interrupción». «La venta de Telefónica Perú se alinea con la visión de Telefónica para la región Hispanoamérica, que la compañía ha declarado no estratégica», afirman desde el banco.. Los analistas de Barclays catalogan la salida de Perú como algo «positivo», «ya que Telefónica no estaba cubriendo su costo de capital en la región y, en nuestra opinión, no existía una vía para alcanzarlo». Sabadell también ve la desinversión «positiva» y con un «impacto limitado», y Renta 4 la ve una «noticia esperada», con un precio de venta «compatible con la difícil situación por la que atraviesa Telefónica del Perú».