Los mercados estadounidenses han cerrado en terreno positivo en la jornada electoral más polarizada y reñida en décadas. El índice S&P 500, referencia de Wall Street, ha marcado este martes una ganancia del 1,23% al cierre de la sesión, mientras que el tecnológico Nasdaq ha ganado un 1,42%. Los primeros colegios electorales cierran sus puertas con la jornada bursátil ya finalizada, lo que ha mitigado los movimientos en renta variable, dado lo incierto del resultado. Pero esta misma incertidumbre sí se está reflejando en los mercados de opciones y futuros. Según han indicado a Bloomberg analistas de Citi, el precio que se paga por las opciones para cubrirse de subidas o bajadas en los índices sugiere que el mercado calibra una subida o bajada del S&P 500 en el entorno del 1,8%.
El S&P 500 marca una subida del 1,23% durante la jornada electoral en Estados Unidos, mientras que el tecnológico Nasdaq avanza un 1,42%
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Los mercados estadounidenses han cerrado en terreno positivo en la jornada electoral más polarizada y reñida en décadas. El índice S&P 500, referencia de Wall Street, ha marcado este martes una ganancia del 1,23% al cierre de la sesión, mientras que el tecnológico Nasdaq ha ganado un 1,42%. Los primeros colegios electorales cierran sus puertas con la jornada bursátil ya finalizada, lo que ha mitigado los movimientos en renta variable, dado lo incierto del resultado. Pero esta misma incertidumbre sí se está reflejando en los mercados de opciones y futuros. Según han indicado a Bloomberg analistas de Citi, el precio que se paga por las opciones para cubrirse de subidas o bajadas en los índices sugiere que el mercado calibra una subida o bajada del S&P 500 en el entorno del 1,8%.
“Sigue habiendo incertidumbre sobre cuándo se dispondrá de resultados fiables. En circunstancias normales, las cosas están lo suficientemente claras como para proclamar al ganador el mismo día. Sin embargo, las elecciones de 2016 y 2020 fueron muy disputadas, y el veredicto final no estuvo disponible hasta los días siguientes, y la última vez, solo cuatro días después. Los inversores deben seguir atentos, ya que unos sondeos de opinión ajustados no significan necesariamente unos resultados cercanos. Además, los mercados pueden reaccionar inmediatamente, valorando el escenario que parezca más probable, incluso a partir de los resultados preliminares”, apunta el banco de inversión Julius Baer.
A la espera de cifras, la sesión está marcada por la fuerte subida de Palantir Technologies, la empresa de inteligencia artificial ligada a la defensa, con una subida del 23%. Si bien la firma está controlada por Peter Thiel, aliado de Donald Trump y de su candidato a vicepresidente JD Vance, la empresa ha publicado buenas previsiones de beneficio. También Nvidia, con un 2,62% y Tesla, con un 3,54%, lideraron las ganancias. Otros activos vinculados, al menos sobre el papel, con el ex presidente también repuntan, como la plataforma de criptoactivos Coinbase o, con más timidez, el propio bitcoin.
Las acciones de Trump Media, empresa ligada al candidato republicano, vivieron una jornada marcada por la volatilidad. Los títulos llegaron a dispararse un 13%, pero perdieron todo ese recorrido y terminaron la sesión con una caída del 1,16% y acumula así una caída del 28% en los últimos cinco días.
La reacción de la renta variable ante los distintos escenarios electorales, de todos modos, no está clara; los analistas consideran que la expectativa de rebajas fiscales en caso de una nueva presidencia de Trump puede elevar los beneficios a corto plazo. Si bien avisan también del riesgo del impacto de la política arancelaria, se considera que el republicano puede elevar las cotizaciones en el corto plazo. Así sucedió en 2016, cuando el S&P 500 subió en las dos sesiones posteriores a la declaración del ganador y un 3% en los 10 días posteriores. Aunque cuando el republicano perdió contra Biden en 2020 la Bolsa subió todavía más, un 7,1% en 10 sesiones, impulsada también por los primeros avances en las vacunas contra el Covid-19.
Ha sido más claro el efecto en los mercados de deuda y divisas. El mercado asocia la eventual presidencia de Trump con más aranceles, más inflación y más gasto público, elementos que han tirado al alza del dólar y de los tipos de interés a largo plazo. “La renta variable estadounidense ha resistido notablemente bien la considerable subida de los rendimientos de los bonos estadounidenses, superando a otras regiones. Más allá de la solidez de los datos estadounidenses, esto refleja la percepción del mercado de que ha aumentado la probabilidad de una victoria republicana, lo que aumenta las perspectivas de recortes fiscales”, explican desde J. Safra Sarasin.
Así, en el mes de octubre el dólar subió con en torno al 3% frente al euro ante la perspectiva de que una economía más inflacionista cortara las bajadas de tipos de la Fed; también las apuestas sobre estos recortes se han moderado. La moneda cotiza con leves subidas tras recortar posiciones el lunes. Más abultado aún fue el movimiento de la deuda: el bono a 10 años aumentó su rendimiento en 65 puntos básicos en el mes. Este martes la deuda de referencia en Estados Unidos se mueve tres puntos básicos al alza, pero la volatilidad implícita en la deuda (lo que cuesta protegerse de subidas o bajadas) es la más alta en un año, y pronostica movimientos de 22 puntos en los tipos de aquí al viernes. El mercado, en todo caso, está pendiente no solamente del nombre del nuevo presidente, sino también de si controlará también las cámaras legislativas. El control del ejecutivo y el legislativo se asocia con un mayor desequilibrio en las cuentas públicas, y actualmente EE UU soporta un déficit de más del 6% del PIB con una deuda que roza el 120% de la economía.