Las mesas de operaciones de los grandes bancos de Wall Street han convertido la incertidumbre en una fuente de ingresos. En la primera mitad de 2025, las divisiones de mercados de las principales entidades financieras estadounidenses se han visto impulsadas por la intensa volatilidad de los mercados, generada en buena parte por el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y sus giros de timón en política económica y comercial, ejecutados a menudo a golpe de tuit.. Seguir leyendo
Las entidades se ven favorecidas en lo que va de año por el aumento en el volumen de operaciones y la recogida de beneficios acumulados de años anteriores
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Las mesas de operaciones de los grandes bancos de Wall Street han convertido la incertidumbre en una fuente de ingresos. En la primera mitad de 2025, las divisiones de mercados de las principales entidades financieras estadounidenses se han visto impulsadas por la intensa volatilidad de los mercados, generada en buena parte por el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y sus giros de timón en política económica y comercial, ejecutados a menudo a golpe de tuit.. En conjunto, los seis grandes bancos estadounidenses (Goldman Sachs, JP Morgan, Bank of America, Citi, Morgan Stanley, Wells Fargo), obtuvieron más de 70.000 millones de dólares, unos 60.000 millones de euros, en ingresos por su negocio de trading, un 16,8% más que en el mismo periodo del año anterior, según las cifras presentadas por las propias entidades esta semana.. Belén Trincado Aznar. El contexto ha sido ideal para los gestores de los bancos. La llegada de Donald Trump a la Casa Blanca con sus vaivenes en política económica anunciados a golpe de tuit, ya provocó jornadas de infarto en los primeros meses del año. Pero la tormenta que desató el pasado 2 de abril al anunciar aranceles para las importaciones de EE UU dando paso a una guerra comercial con el mundo, ha provocado movimientos masivos de dinero en busca de refugio. A río revuelto, ganancia de pescadores.. Por un lado, ese aumento del número de las operaciones de compraventa supone mayores ingresos en forma de comisiones para las entidades. Por otro, al deshacerse de posiciones para evitar las caídas, han obtenido beneficios gracias a las amplias subidas que acumulaba el mercado en los últimos años. También se han beneficiado por los flujos de capital que han salido desde Estados Unidos hacia los índices europeos. Además de la revalorización en Bolsa, la apreciación de la divisa comunitaria frente al dólar supone una ganancia adicional para las operaciones liquidadas en euros y convertidas a billetes verdes americanos.. En este entorno, Goldman Sachs lidera el crecimiento del negocio en Bolsa, con un aumento del 31,1% interanual en ingresos, hasta los 8.493 millones de dólares en el primer semestre de 2025. La entidad sorprendió al mercado en el segundo trimestre con cifras récord en el negocio de renta variable. El banco se ha beneficiado tanto del fuerte volumen en derivados como del reposicionamiento de carteras institucionales. “En este momento, la economía y los mercados, en general, están respondiendo positivamente al cambiante entorno político. Sin embargo, como los acontecimientos rara vez se desarrollan de forma lineal, seguimos muy centrados en la gestión de riesgos”, expresó el consejero delegado de Goldman Sachs, David Solomon.. Morgan Stanley no se queda atrás. La entidad ingresó 16.626 millones de dólares en el semestre en su división de mercados, lo que supone un 19,5% más que en el mismo periodo de 2024. Su fortaleza estructural en renta variable y la reactivación de operaciones corporativas impulsaron sus resultados. Le sigue JP Morgan, que con 18.600 millones sigue siendo el líder absoluto por volumen. En términos relativos, aumentó los ingresos del negocio en Bolsa un 17,7%.. Por su parte, Citi, obtuvo unos ingresos de 11.865 millones por la operativa en Bolsa, un 13,6% más. “Sospecho que la volatilidad será una característica, no un defecto, del nuevo orden mundial, y nos beneficiaremos de ello”, aseguró Jane Fraser, consejera delegada de Citigroup, sobre los ingresos en el negocio de mercados.. Bank of America también ha logrado sacar beneficios en medio de las turbulencias del mercado. El banco elevó un 11,8% los ingresos por el negocio de mercados hasta los 11.022 millones. “También nos estamos beneficiando ahora mismo del reposicionamiento de las carteras de clientes. Hay mucha incertidumbre geopolítica, muchos cambios en las tasas, las elecciones del año pasado que llevaron a nuevas políticas este año y cambios en la cadena de suministro”, explicó Alastair Borthwick, el director financiero del banco, recoge Reuters. Por su parte, Wells, Fargo, que cuenta con una división menor de mercados, registró ingresos por 3.606 millones de dólares, prácticamente la misma cifra que en junio de 2024 (-0,4%).. El denominador común para todos ellos ha sido la volatilidad. Aunque suele suponer un riesgo para los inversores particulares, para los bancos que cuentan con fuertes plataformas de negociación representa una ventaja competitiva. La incertidumbre global se ha convertido, paradójicamente, en una fuente recurrente de ingresos. Además, coincide en un momento en el que la concesión de crédito o la banca minorista, se enfrenta a una presión por los menores márgenes a medida que bajen los tipos de interés.. Tras las abruptas caídas de los mercados que de principios de abril, los mercados se han ido recuperando paulatinamente, en parte por la tregua comercial decretada por Trump. El S&P 500, que llegó estar al borde de entrar mercado bajista, ha alcanzado esta misma semana sus máximos históricos. Pero los mercados continúan siendo sensibles a los vaivenes de la política estadounidense, especialmente ante las señales contradictorias en materia de comercio internacional, fiscalidad y tipos de interés.. “Nuestros clientes parecen haberse vuelto un poco insensibles a los titulares, pero sigue siendo un mercado poco saludable”, dijo Jeff O’Connor, de Liquidnet a Reuters. En ese sentido, los bancos mantienen un tono prudente para la segunda mitad del año, ya que la impredecible política de Trump, además de los riesgos geopolíticos, amenazan con más jornadas de intensa volatilidad en los mercados.